Siempre me ha gustado la Navidad. Cuando era pequeña más, la verdad. Creo que porque la disfrutaba y no la analizaba, aunque oía en conversaciones de los mayores que "la Navidad es triste" o "se echan de menos a los que no están". Cuando era niña mi principal motivo de alegría era no tener colegio y poder estar en casa sin hacer nada más que jugar y mangonear a mis cuatro hermanos. El verano es muy largo y al final aburre pero la Navidad es corta. Justo cuando se empieza a poner mal, allá por el 3 o 4 de enero van y vienen los reyes como puntilla final.
Para mi la Navidad era el momento de bajar a Jaén y que no hiciera calor y comer muchas, muchas cosas ricas. La mayoría guardadas bajo un pañito en una bandeja de alpaca en la parte baja del armario del salón de casa de mi abuela Felisa o de mi tia Tere. Cargada la bandeja de bolas de coco para mi hermana Cristinilla, alfajor caserísimo para los mayores, hojaldrinas de las de panadería para Carmen y su dedo chupador de azúcar mantecados de huevo para mi y el resto de cosas y todas las nuestras para el ratón de mi hermano Eduarditogüevofrito. A Andrés (mi hermano pequeño) no lo recuerdo comiendo mucho, pero lo cierto es que no comía ni en Navidad ni cuando no lo era, por eso mi madre le daba Desarrol que a mi primo Luis Felipe le había ido muy bien, decía mi tía Luisa, pero los genes de Andrés no iban a resultar ser los mismos que los de Luisfe. Volvíamos cargados de chorizos de matanza, aceite, alcaparrones para mi madre (a los demás no nos gustaba a ninguno), patatas de Casa Paco para mi padre (o eso creía él que luego nos las comíamos nosotros) y una mezcla de olor a gasolina de la época (que entonces olía más), sudor de niño fogoso, y comida andaluza contundente. A 60km por hora por la autovía de Andalucía un Madrid muy frió y muy luminoso nos esperaba a los 7 con los brazos abiertos.
Con mis dos familias, la materna y la paterna, comíamos mucho, cantábamos una barbaridad y los niños jugabamos hasta caer rendidos. Nosotros eramos cinco, pero por parte de madre eramos 17 primos y por parte de padre 11. Los juegos,las injusticias, las rendiciones, los sobornos, los besos, las peleillas, los "Eduardito me ha pegadoooooooooooooo", estaban normalmente asegurados. Y en Navidad más.
Con la edad llegó la adolescencia y los primeros novietes asomaron las cabeza muy precavidamente y en uno y otro destino (Jaén y Madrid) tuvieron que aguantar chanzas y bromas demostrando correa en dos familias matriarcales a la Española los hombres y las mujeres ser merecedoras de los "nuestros". Más guapos no hay ninguno.
Yo adoro a mis tías y mis tíos y a mis abuelos, tres de los cuatro los disfruté hasta estar entrada en la adolescencia y por corriente de simpatía amé a mis primos y primas. Todos me enseñaban en cada momento que podían que el amor, la risa y el perdón eran las armas de mis dos familias tan dispares a la vez pero tan iguales.
Hoy, a dos semanas de la Navidad, cuando ya solo me queda una abuela y vive en Málaga y yo en Barcelona, cuando mis padres ya no están juntos y mis tios y primos andan por toda la geografía española, hoy, estoy triste. Y... luego sonrío y recuerdo que lo más importante que tengo son todos ellos y que si cojo el teléfono y llamo a cualquiera, pero a cualquiera de ellos, sonreirán, me demostrarán lo que me quieren y la alegría que les da el que les haya llamado y entonces me daré cuenta que esta Navidad, aunque no esté cerca físicamente de muchos de ellos, todos, todos, estarán siempre espiritualmente conmigo. Y yo tengo que ser capaz de enseñarle eso a mi hijo Luc.
Feliz Navidad a todos
Foto del belén de mi casa del año 2010 con "cielo" pintado por Luc
Pues claro que te queremos, !Preciosa!!!!
ResponderEliminar:) y yo a vosotros tío... mucho. Muchos besos a mi abuela del alma
EliminarOhhhh Ann... Que profundoooo!!! Me ha llegado al alma...creo q es el post q mas me ha llegado. Que bonita es la familia q aunque este lejos siemmpre estan ahi. Y en si estas fecha son para eso, para estar con la familia y recordar a los q estan lejos o q ya no estan.
ResponderEliminarT'estimooo Ann de la jung <3
Fdo. Lucecita ;-)
Oh!!! Mari Luz, cómo me emociona que te haya llegado a tí en particular, por tus hermanos y tu familia. Gracias por compartir ese sentimiento conmigo. Mucho amor, tu Ann de la Jung
EliminarLinda!!
ResponderEliminarA mi siempre me toca extrañar a alguien en navidad también... En estas, tu serás una de esas personas.
Y como siempre, te pensaré con mucho cariño.
Cuñaita, vendrán otras navidades en las que reír, tocar las zambombas ;) bailar y comer. Con mucho amor, yo este año brindaré por vosotros cuatro. Mil besos
EliminarJolin.... He llorado, claro. Muy típico también mío.en Navidad. También me he reido. Te quiero.
ResponderEliminarJolin... no se que decirte por que eres anónimo pero supongo que yo... yo... también te quiero :) mucho amor del ciberespacio para ti
Eliminar"Jolín", ¿quien eres, que intrigas?
EliminarLa gorda!
EliminarGorda mía preciosa llorica!!! a mis brazos. Luego te pego bocaillos en las mejillas. Te quiero mucho, tú si que eres hermana mía y no la otra que habíamos adoptado...
EliminarNo sé que me pasa cuando leo tus post que me vienen a la memoria canciones de Mecano. ¿qué cuál? "Una año más"
ResponderEliminarSupongo que antes de Navidad tendremos (please) algún post más, pero por si acaso FELIZ NAVIDAD para ti y para toda la gente que te sigue... Muchos Besos y que el próximo año echemos por tierra las pesimas previsiones que nos han echado encima.
Silvia.
Jajajaj, tienes razón. Soy muy Mecano. Fan y Mecano también ;) pues un año más y mejor que el pasado- Económicamente no, pero emocionalmente si, y eso no siempre se puede decir. Crecer más y quererse y no multiplicarse que no se puede pagar. Y tendrás más post, claro, en Navidad no hago mucho, la verdad. Besos querida Silvia
EliminarOye... Acabo de leer tu anónimo, no será como el anonimo de Cecilia y sus ramitas de violetas ¿verdad?
ResponderEliminarSilvia.
No. Mi marido no llora. Ni lee. Ya te lo he dicho. Yo creo que es una chica (los chicos no me confiesan públicamente que me quieren y menos después de llorar leyendo mis posts), pero no se sabe... nunca se sabe. Los chicos tampoco dicen jolín. Definitivamente es una chica
EliminarA veces la vida da sorpresas... Me alegra leer que estás bien (a pesar de haber dejado el yoga)... Yo sigo con mi psicóloga, haciendo camino.
ResponderEliminarS.
ya.... bueno hija, a ver si hay suerte y es un hombre que dice jolín, llora, me quiere y esta bueno ¿será mi padre? Abrazos de amor para el camino.
EliminarMi hermana Carmen. Misterio resuelto. Habrá que esperar a otro post para que aflore el del ramito de violetas...
EliminarHace unos días lo leí por primera vez pero la emoción no me dejó responderte... Has "escrito" un cuadro, una pintura... con gran colorido y sentimiento. Me encantó, Ana, hasta las lágrimas... Alejandra
ResponderEliminarAlejandra... ¿Qué te puedo decir? Me emociona tú emoción y cómo describes lo que para ti es un cuadro de la navidad. Muchas gracias, de corazón y felices días con los tuyos
EliminarQue bien describes los sentimientos y así es Ana somos portadores para con nuestros hijos de las tradiciones que nos han ido enseñando nuestros mayores con tanto primor y cariño a fin de cuentas somos lo que hemos vivido en la infancia a través del cariño y la entrega de padres, abuelos, tíos y primos
ResponderEliminarGracias tía, describo lo que me habéis enseñado y lo que he respirado durante 40 años. Besos de turrón
EliminarJo, como he llorado, es que te dejas el Alma Lady, pero encima es que es verdad todo lo que cuentas, y huele y sabe y es que tu familia es tan increible, que los Morci son mucho, y tu eres muy de querer a la familia, muy de calor, eres un cielo. Eres maravillosa Lady Anne, brillas mucho. Feliz Navidad. Te quiero
ResponderEliminarFeliz Navidad a ti también Lady, que modo de llorar todos... se ve que estamos sensibles y la Navidad y la familia nos gusta, me alegro un montón. Te quiero, con calor y con cielo. Tu Lady
EliminarJa, ja el dedo chupador de azúcar!!!
ResponderEliminarYa espero la segunda parte !!
Feliz, siempre feliz, Navidad, pues aunque los R.M no existen,te das cuenta de otras grandes cosas,que de peque se te escapan, mas tenues e increíbles, mas sutiles y maravillosas como esos lazos familiares de cariño, que aprietan lo justo para crecer como ser humano, con calor y libertad.
Jajajajaj, es que el dedo de Carmen es histórico y muy absorbente cual spontex. yo creo que los peques captan mucho más amor que los adultos, más tenues y más increíbles. Respiran y lo huelen. Gracias por tu guitarra y tu pintalabios carmín... próximamente parte 2...
EliminarQué bonito Peregila! No estés triste! (Madre mía, sí que llevo tiempo sin asomar, que has escrito un montón de cosas!).
ResponderEliminarA mí también me ha encantado siempre la Navidad y en mi familia tendríamos motivos para que no nos gustara (con seguridad, más que en otras familias). Por supuesto que es el momento en el que echas de menos a los que no están, pero hay que estar por los que sí que están y especialmente por los niños (en mi familia los más peques ya son cada vez menos niños, pero bueno, algunos seremos niños siempre).
El caso es que recuerdo con gran cariño las navidades de niña en Barcelona (en mi caso nos juntábamos con la familia de Barcelona y a veces venía mi tía de Ávila, a la que adoro). Yo recuerdo que todo era muy bonito, con las costumbres del "Tió", con las decoraciones, la carta de los Reyes, El Corte Inglés, la excursión del cole al Mercat de Santa LLucia, el Festival del cole de Navidad... O antes había más ambiente, o me lo parece a mí. Y a veces, HASTA NEVABA!
Después nos fuimos a vivir a Lanzarote y todo cambió. Allí hace calos, los guiris van a la playa y no hay tanto ambiente. La cosa se fue enfriando, mi hermana pequeña creciendo y cada vez se celebraba menos en casa (vamos, ni arbolito ni nada).
Cuando me fui a estudiar, en Tenerife había un poquito más de ambiente, y en la residencia teníamos nuestra gran cena con festival de Navidad y jugábamos durante una semana al amigo invisible (el mejor amigo invisible "ever").
Desde que empecé a venir a Alemania por Navidades, volví a toparme con el ambiente navideño. En este pueblo es más navidad, pues casi parece navidad todo el año, con sus casitas alemanas bonitas...
Tengo que poner na foto en el blog, pues está todo nevado y bueno, con los mercados navideños alrededor, todo está bonito y se siente el calor del hogar cuando vienes del frío de la calle. La chimenea encendida, es agradable.
Cantan menos villancicos y la arman menos (estos alemanes...), pero MOLA. :-)
A mí me gusta la Navidad y ver la cara de los niños cuando ven a San Nicolas, a Papa Noel, a los Reyes Magos, o abren el regalo que estaban esperando (y los no tan niños, o los eternos niños, como yo misma!).
Saludos guapi, y no estés triste. :-)
Gracias por compartir tú Navidad conmigo Stu. La melancolía no es tristeza aunque se le parece mucho. Yo nunca diría que Chavela Vargas era triste aunque un poco si lo estaba :) Bueno, este estado mio es consecuencia no solo de la Navidad sino de cómo está todo al rededor, pero como bien dice una amiga mía el alrededor se arregla desde dentro de una misma. Así que, allá voy. Yo estuve una vez en Oberammergau en pleno verano y todos nos juramos (hace ya 10 años) que volveríamos en Navidad. No lo hemos hecho y tengo muchas ganas de cumplir ese deseo y ver ese pueblo de película Navideña nevado de verdad. Besos preciosa, y Feliz Navidad!! con vino con canela ;)
EliminarDe Enrique: "Hoy, por firme recomendación de mi hermana Alejandra Atz, lei tu "Navidad, Navidad, dulce Navidad....". Sencillo, emotivo, bien escrito... me encantó!! Gracias por compartir esas vivencias. Enrique"
ResponderEliminar