Creo que el nivel de intimidad y pudor con el que uno se siente cómodo, viene de impronta genética y la actitud de tus padres, familiares, sociedad o momento histórico en el que toca vivir, lo pueden alterar más o menos. Hay personas muy pudorosas con su desnudez y la de los demás pero sin ningún pudor para la sanguinolencia, el sufrimiento y la violencia verbal o física, gratuita o justificada (si es que existe la violencia justificada). No siempre va de la mano el ser o no pudoroso y el tener cuidado o no de tu intimidad y la de los demás.
En el caso de ser pudorosa yo lo soy cero. No me altera lo más mínimo mi desnudez o la desnudez de los demás. Muy natural me parece, aunque la desnudez no es habitual. No ando en bolas por la calle por dos razones. La primera que me quemaría o me enfriaría en exceso. La segunda que aquí, en España, sería detenida por escándalo público. En cambio, lo de Cospedal, Barcenas, Pantoja y demás no debe ser escandaloso aunque es público y notorio lo que han hecho. Matices del diccionario de última generación. No me apetece quemarme o enfriarme (aunque, a veces, si me apetece ser detenida, por lo de ir contra el sistema que últimamente me tiene más quemá que la pipa de un indio). Voy, pues, con ropa.
El la playa no me pongo tal cual llegué al mundo tampoco y en este caso lo hago por los otros. Por "respeto". Lo que si que hago muchas veces es cuando estoy sola nadando mar adentro me quito el bikini y me lo ato a la correa de las gafas de bucear o a una pierna. La última vez que lo hice iba nadando con mi hijo Luc y además estábamos en una playa textil que permite el nudismo. Ya había entrado en el agua sin la parte de arriba y en seguida me quité la de abajo. Le dije a Luc que se quitara el bañador que le quedaba tan apretado a finales del verano pasado que el pobre parece Burt Lancaster en "El nadador". Dijo que no mama, pero se dejó hacer. Siempre se deja hacer. Es tan buen nene. Ais...
Pensé que al contacto de la mar salada con su cuerpecico, sus gafas viendo los peces de la Costa Brava y sentir la libertad que da la desnudez absoluta, el pudor le desaparecería. Pero no. Me pidió el bañador de vuelta. "Hijo, pero ¿no te da mucho gustico?" "Si mami" me replicó "Mucho gustico me da. Pero yo quiero que me devuelvas el bañador ya". Muy serio, lanzándome su mirada de pocas-bromas-mami, mano estirada sobre las olas. Mientras me desataba su bañador de las gafas (parecía yo un tenderete de ropa de chiringuito de playa) pasó alguien cerca. Le dio vergüenza y se zambulló con todo el culo blaquísimo en pompa. Pobre hijo mio.
En la desnudez yo soy igualita a mi madre (desnudas no, eh, no jodamos). Tengo que aprender que mis ojos no son los del mundo y que mis gusticos no son los de los otros. Mi falta de pudor acaba donde empieza la de los demás. Todo esto viene por que hay amigos míos que no entienden mi pudor a la hora de no querer ir al baño con miembros de mi familia (hermanas y pareja, no más allá, por favor) pero ni hermanas, ni pareja ni amigas cuando teníamos ambas 15 años. Nunca he soportado hacer pis delante de otro. Cuando Luc me cerró la puerta del baño en las narices un buen día, pensé "Bueno menos mal. Un trago que me ahorro". Ahí, para mi, pasamos a la linea de la intimidad. Eso del pis es intimo. Pues para ti. No me necesitas para nada. Ni para dar conversación, ni para sujetar la puerta por si entra alguien.
La intimidad en la red es otra cosa. "Chica, que cosas cuentas". Me dicen algunas. "Yo no podría". Claro, hija, porque a ti no te pasa nada digno de ser contado. ¿O si?. A tooooodos nos pasa exactamente lo mismo. Cuanto más mayor me hago más cuenta me doy. Pastaditos todos. Clavados en las penas y las alegrías y las alergias. De pronto, a alguien lo secuestran (un horror) o a alguien le toca la lotería (un alegrón) pero, vamos estos dos casos, no son nada, nada habituales. Andrés, mi hermano pequeño, se ríe diciendo que se parte con mis estados de Facebook porque, a veces, tienen un montón de "me gusta" y está seguro que la mayoría no sabe que es lo que estoy poniendo realmente. "Lo mejor, Ana, es que a ti te da igual. Tú estado es tan enrevesado como tú. Y suele expresar algo que es solo para ti o tal vez para alguna persona como la Marquina y ella lo sabe y los demás no y de pronto tienes 10 "me gusta". Escribes ese estado exactamente igual que piensas y, bueno, eso mola. Tú eres así y te importa un pito lo que puedan pensar los demás".
Odio la gente parásita en general y más en Facebook. Los que viven de absorber las vidas de los demás sin entregar nada a cambio. Si tú quieres saber que tal bien o mal me va, chafardero, a mi me gusta también saber que tal bien te va ¿no?. Por eso me cambié el nombre. Solo quiero que me encuentre quien yo quiero que me encuentre, no alguna imbécil que no me hablaba en el cole y ahora me cotillea y me merienda en la intimidad de su casa. Quid pro quo, que decía Anibal Lecter. Yo te doy, tu me das. De todos modos si no entiendes mi estado es que no era para ti. Que retorcida, Ana, y por que no se lo dices a quien se lo quieres decir en privado. Porque me lo paso tan bien cuando de esas 10 manitas diciendo "me gusta" una es para quien lo puse. Cuando lo que escribo es para mi, me pongo "me gusta" yo misma. Lo hago al cabo de los minutos o cuando entro a las horas y lo leo. "Ah, que era para mi. Que bonica fui y que bien me sentía hace dos horas y ahora que mal me siento. Bueno. Me pongo un me gusta. Pobre"
Mi intimidad es mía. La intimidad de los míos, por muy míos que sean, es suya. Luc aún no sabe de su fama on line. Con el tiempo me puede reclamar, pero, mientras, me la voy jugando con él. Total, lo que pongo solo lo entienden unos pocos y además está escogidito para no hacerle pasar mucha vergüenza el día que lo descubra. De mi pareja no cuento nada por que tiene 36 amigos en Facebook y yo no soy una de ellos. Con eso digo todo. Y mis hermanos ya no me cuentan nada porque "Ana, hija, eres una bocazas". De ellos tampoco hablo. Solo muy de tarde en tarde y en clave Re.... Ma.... ;)
Por cierto la foto que tenía en bolas me la han censurado los de blogger. Una pena. Os quedáis con esta tan aséptica del inicio de Facebook. Feliz semana para todos.